Las razones para tomar el Transiberiano, el viaje en tren más largo del mundo

Si tanto como a nosotros, les gusta viajar y descubrir el mundo, hay una ruta en tren que los hará vivir experiencias inolvidables.

El tren más largo del mundo es el famoso Transiberiano, que atraviesa Rusia de un extremo a otro, ofreciendo vistas impresionantes de paisajes y ciudades. Esta ruta conecta Moscú con la ciudad oriental de Vladivostok, en las costas del mar de Japón en el océano Pacífico.

El recorrido del Transiberiano los llevará a través de paisajes asombrosos, como los montes Urales, el enorme lago Baikal, las extensas estepas de Siberia y los campos de cebada de Mongolia.
Además, podrán explorar ciudades importantes como Ekaterimburgo, Omsk, Irkutsk, Tomsk y Chita. Este viaje cubre 87 ciudades y pueblos, cruza 16 ríos, recorre una distancia de 9.297 kilómetros y atraviesa 7 zonas horarias diferentes.

Está provisto de servicios de baños, áreas de cocina y dormitorios, lo que brinda la oportunidad de descansar y disfrutar del trayecto.

A bordo, se ofrecen tres niveles de servicio: la primera clase, que es la más lujosa, seguida de la segunda y tercera, gestionadas por compañías privadas y equiparables a hoteles de alto nivel.

Este recorrido les permitirá apreciar los cambios en los diversos paisajes de Rusia y también sumergirse en la riqueza cultural de las numerosas ciudades que visitarán.

El tren pasa junto al lago Baikal, el más profundo del mundo. 

Además, esta ruta fue establecida en 1916 bajo la dirección del Zar Nicolás II, quien colaboró con el creador del Orient Express de la empresa Wagon List para brindar un servicio excepcional.

En conclusión, viajar a bordo del Transiberiano es mucho más que un simple recorrido en tren; es una experiencia única que les permite sumergirse en la vasta diversidad de paisajes y culturas que ofrecen todos los sitios que va recorriendo.