Circo Massimo: el estadio más grande de la Antigua Roma que sigue cautivando al mundo 🏟️

Autor invitado: @gustavodonofrio

Ubicado en el corazón de Roma, entre los montes Palatino y Aventino, el Circo Massimo (Circo Máximo) fue uno de los centros de entretenimiento más impresionantes del Imperio Romano. Aunque hoy en día solo quedan sus vestigios, su legado sigue vivo como símbolo de la grandeza arquitectónica y cultural de la antigua Roma.

El Circo Massimo está situado en el Valle Murcia, una depresión natural entre dos de las siete colinas de Roma. Se encuentra muy cerca del Coliseo, el Foro Romano y otros sitios emblemáticos. Actualmente es una gran explanada pública, utilizada para conciertos, eventos deportivos y manifestaciones populares.

El origen del Circo Massimo se remonta a la época de los reyes etruscos, en el siglo VI a.C. Fue el primer y más grande circo de Roma. Sin embargo, alcanzó su apogeo bajo los emperadores Julio César y Trajano, quienes ampliaron su capacidad y lo dotaron de mármol, estatuas y estructuras monumentales.

Durante siglos, fue el epicentro de las carreras de cuadrigas, un deporte apasionante que atraía multitudes. También se celebraban allí juegos públicos, desfiles triunfales, espectáculos circenses e incluso simulacros de batallas navales en ciertas épocas.

En su máximo esplendor, el Circo Massimo podía albergar a más de 250.000 personas. Su estructura alargada medía aproximadamente 600 metros de largo por 140 metros de ancho, convirtiéndolo en el estadio más grande de la antigüedad. Contaba con gradas de piedra, tribunas imperiales y espacios para la élite romana.

La «spina», una plataforma central decorada con obeliscos y estatuas, dividía la pista. A ambos lados, las cuadrigas giraban a toda velocidad, desatando el entusiasmo del público. El acceso era gratuito, lo que lo convertía en un lugar de encuentro para todas las clases sociales.

Tras la caída del Imperio Romano, el Circo Massimo fue abandonado. Muchos de sus materiales fueron saqueados para construir otros edificios. Con el paso del tiempo, quedó sepultado bajo tierra y utilizado como zona agrícola.

En la Edad Media, la zona fue reconvertida en viñedos y huertos. No fue hasta el siglo XX que comenzaron las excavaciones arqueológicas que revelaron la magnitud original del circo.

Hoy es un parque arqueológico abierto al público, ideal para pasear, hacer deporte o simplemente contemplar la historia. También es un escenario habitual para grandes eventos culturales y conciertos multitudinarios. En 2020, por ejemplo, fue sede de la celebración del campeonato de la Roma en la Serie A, reuniendo a miles de aficionados.

En la zona también se encuentra un museo subterráneo interactivo, que permite al visitante revivir las carreras de cuadrigas con tecnología de realidad aumentada. Además, las visitas guiadas explican con detalle la evolución del lugar y sus múltiples funciones a lo largo de la historia.

El Circo Massimo representa el espíritu romano: grandeza, pasión, espectáculo y permanencia. Aunque sus piedras ya no resuenan con el rugir de los carros, sigue siendo un espacio donde el pasado y el presente se entrelazan.

Si estás en la capital italiana, no podés dejar de caminar por el Circo Massimo. Es mucho más que un campo abierto: es una ventana directa a los días gloriosos del Imperio. Y aunque su gloria haya quedado atrás, su majestuosidad sigue intacta en la memoria de quienes lo visitan.