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Autor invitado: @gustavodonofrio
Si sienten fascinación por la historia y la literatura, una parada obligada en la visita a Ámsterdam es el Museo de la Casa de Ana Frank. Este emblemático lugar ubicado en Westermarkt 20 de la capital neerlandesa, fue testigo de los momentos más intensos y desafiantes de la joven judía durante la Segunda Guerra Mundial, mientras se escondía de los nazis junto con su familia y otros cuatro compañeros.
Click acá para ver actividades en ÁmsterdamUbicado en el edificio que albergaba el negocio de especias y conservas de Otto Frank, el padre de Ana, el museo revela el anexo trasero (conocido como “La casa de atrás”), que sirvió como refugio secreto durante más de dos años. Fue en este espacio donde la familia Frank y sus compañeros vivieron en la clandestinidad hasta que fueron descubiertos y deportados a campos de concentración. La entrada al escondite, camuflada tras una estantería giratoria, aún se conserva como un testimonio tangible de esos oscuros días. Atravesar esa puerta llena el alma de emociones.
Al recorrer las diversas habitaciones del anexo, los visitantes pueden admirar objetos personales, fotografías y documentos que pertenecieron a los habitantes del refugio. Destacando entre las exhibiciones se encuentra el diario original de Ana Frank, resguardado en una vitrina bajo estrictas medidas de seguridad. Este diario, que narra las experiencias, temores y esperanzas de la adolescente que anhelaba convertirse en escritora, es una conmovedora ventana al pasado.
El museo también ofrece exposiciones temporales que abordan temas relacionados con la vida de Ana Frank, la persecución de los judíos, el Holocausto y los derechos humanos. Además, cuenta con una librería, una cafetería y un centro educativo para enriquecer aún más la experiencia de los visitantes.
Para planificar la visita, es esencial reservar los boletos con bastante anticipación a través de la página web oficial del museo https://www.annefrank.org/es/. El costo de la entrada es de 12,50 euros para adultos, 6,50 euros para jóvenes de 10 a 17 años y gratuita para menores de 10 años.
El horario del museo varía según la temporada, pero generalmente abre sus puertas todos los días desde las 9:00 hasta las 19:00 horas. Se entregan auriculares al ingreso, aunque el audio está solamente en inglés, y no está permitido sacar fotos ni filmar en ninguna parte del edificio.
Explorar el Museo de la Casa de Ana Frank es una experiencia única e inolvidable que los sumergirá en la vida de una de las figuras más significativas de la historia contemporánea y les recordará los horrores del nazismo. No dejen de incluir esta visita en su itinerario si planean viajar a Ámsterdam.
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