Marrakech: un viaje a la “Ciudad Roja”

Autor invitado: @gustavodonofrio

Marrakech, es un destino que los transportará a un mundo de encanto, exotismo y misterio. Esta interesante ciudad, situada en el corazón de Marruecos, ofrece una experiencia inolvidable llena de colores, sabores y cultura.
En este artículo, los llevaremos a un viaje virtual por las calles de Marrakech para descubrir sus maravillas.

Para llegar a Marrakech desde la mayoría de las ciudades internacionales, la mejor opción es volar al Aeropuerto de Marrakech-Menara, que se encuentra a unos pocos kilómetros del centro de la ciudad. Desde ahí se puede tomar un taxi o utilizar el servicio de traslado al centro de la ciudad, donde comienza la aventura.

La Medina de Marrakech es el alma de la ciudad y un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En este lugar los vas a sumergir en un laberinto de calles estrechas y callejones llenos de vida, donde el bullicio de los mercados y los aromas de las especias y de las diferentes comidas de los puestos callejeros los envolverán. En este lugar van a poder conocer la verdadera esencia de la cultura marroquí.

Centro neurálgico de la parte antigua de la ciudad, es todo un espectáculo visitarla tanto de día como de noche. Se van a encontrar desde artistas callejeros hasta encantadores de serpientes –sí, esos de las películas, donde la cobra es encantada por el sonido de la flauta-, los cuales van a permitir que les saquen fotos… siempre que paguen.

Los zocos (mercados) de Marrakech son famosos en todo el mundo. Pueden explorar los zocos de la Plaza de Jemaa el-Fna, donde van a encontrar una gran variedad de productos, desde alfombras y cerámica hasta ropa y joyas. No duden en regatear, ya que es parte de la cultura de las compras en Marruecos.

Construida alrededor del año 1100, la Mezquita Koutoubia se alza como un faro en la ciudad. Con su impresionante arquitectura y su minarete de 70 metros de altura, es un lugar de gran importancia religiosa y una maravilla arquitectónica.

Marrakech también es conocida por sus hermosos jardines. Los Jardines de Majorelle, diseñados por el artista Jacques Majorelle, son una joya de la ciudad con su vibrante azul y exuberante vegetación. Además, los Jardines de la Menara ofrecen un espacio tranquilo para relajarse y disfrutar de las vistas a la montaña Atlas disfrutando de su gran estanque, que es un oasis en medio del desierto.

Construida en el siglo XII, es considerada la puerta más bella de Marrakech. Era la puerta de entrada principal a la kasbah real en la Medina. Es un punto de interés imperdible en nuestro recorrido.

Por la noche, la Plaza de Jemaa el-Fna cobra vida con espectáculos callejeros, puestos de comida y músicos. La mejor opción es sumergirse en esta atmósfera mágica mientras se disfruta de la deliciosa cocina marroquí, como el cuscús y el tahine.

Un lugar que contrasta definitivamente con todo lo que mencionamos hasta ahora, es la parte más moderna de la ciudad, donde se lleva a cabo la mayor parte de la actividad económica de la ciudad y donde están ubicados la mayor cantidad de los edificios gubernamentales de la ciudad. En esta zona está el Menara Mall, un gran centro comercial que se encuentra a menos de 20 cuadras de la Mezquita Koutoubia, y que alberga a las grandes marcas mundiales de la moda y la tecnología, como así también a importantes joyerías y locales de comida tradicional marroquí y de cadenas muy conocidas de comida rápida.

En resumen, Marrakech es una ciudad que los sumergirá en una cultura rica y fascinante, donde la historia y la modernidad se entrelazan de manera única. La ciudad es segura, cuidan al turista, y seguramente van a volver con algún amigo local en tu agenda de contactos, porque son personas muy amables y serviciales.
Desde los zocos hasta los palacios, los jardines y la deliciosa comida, Marrakech es un destino que les va a dejar recuerdos imborrables.