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Autor invitado: Tincho Disney
Orlando es, sin lugar a dudas, la cuna de los parques temáticos como Disney World y Universal Studios. Hace rato que se trata de un destino que amerita al menos una semana para poder disfrutar de al menos parte de la gran variedad de opciones para todas la edades. Por eso, decidir dónde quedarnos al momento de viajar es fundamental para aprovechar nuestro tiempo al máximo. En esta nota abordaremos algunas de las claves de cómo definir si hospedarnos dentro de alguno de los resorts de los parques o por fuera. También hablaremos de la enorme cantidad de opciones de hospedaje al considerar estos puntos centrales para que hacer nuestra elección no sea un dolor de cabeza.
Aquí no hay magia: planes, economía y movilidad
Como bien dice el título, esos tres son los puntos que ayudan a definir si quedarnos en Disney o no. Si bien es algo absolutamente personal, utilizar estos factores, en el orden que cada uno prefiera, es una forma amigable para decidirlo. Por ejemplo, si sabemos que Disney tiene los únicos parques que nos interesa visitar, un hotel al interior de los resorts es la mejor opción. Si, por el contrario, sabemos que no podemos pensar nuestro viaje sin un auto de alquiler (y alguien del grupo maneja, obviamente), hospedarse en Disney o en Universal no es necesario para poder disfrutar de los mismos. Por último, si manejamos un presupuesto ajustado, no hace falta quedarnos en los hoteles dentro de los parques para poder disfrutar de una experiencia inolvidable.
La idea del párrafo anterior es dejar en claro que el orden de los factores no altera el producto, es decir, podemos empezar a pensar nuestro viaje desde cualquiera de las tres variables e inevitablemente llegaremos a un equilibrio personal e ideal para nuestro plan vacacional. De todas maneras, veamos cada una de las tres brevemente.
Equilibrio entre ahorro y beneficio
No es ningún secreto que la ciudad Orlando o su vecina Kissimmee son distritos cuyos ingresos dependen en enorme medida de los visitantes de los parques temáticos. Por esto, las opciones son múltiples y contemplan gran variedad de precios. Por lo tanto, si viajamos con presupuesto ajustado, quedarnos fuera de los parques no nos priva de disfrutar de toda la magia de los mismos. Una desventaja a tener en cuenta es el costo de los estacionamientos de los parques, aproximadamente sale USD 25 por día. Más aún, si no contamos con movilidad, prácticamente todo hotel que se precie de tal cuenta con transporte propio y complementario a los parques. Así, esto resulta una opción más que atractiva para quienes buscan la magia de Disney o el perfil más adolescente-adulto de Universal, así como otras oportunidades interesantes como Sea World y Bush Garden.
En este punto, les sugerimos no confiarse con la afirmación anterior y corroborar con el hotel de nuestra elección cuáles son los transportes posibles a los parques y sobre todo los horarios, puesto que dichos servicios son bastante severos con sus horarios, y lo más apropiado sería cruzar los mismos con los de cada parque, para saber hasta qué hora podemos disfrutar de ellos antes de estar puntuales en los puntos de recogida. En resumidas cuentas, quedarnos por fuera es un ahorro económico pero que requiere de un poco más de planificación.
Queremos magia: por qué elegir Disney
Pongamos ahora por caso que nuestro presupuesto nos permite estirarnos un poco, sea en las opciones más económicas dentro de los hoteles Disney (no son muchos, pero que los hay, los hay) o, más fortuitamente, podemos optar por alguna de las habitaciones de los resorts más selectos. Aquí debemos plantearnos dos cuestiones. En primera medida, la gran cantidad de promociones que salen constantemente para elegir hospedaje en los resorts. Éstos suelen estar asociados a temporadas bajas, principalmente, y aprovecharlos reducirá costos significativos a la hora de reservar.
En segunda medida, al contrario de lo que hablamos en el párrafo anterior, un gasto en la hotelería interna es un ahorro en tiempo y planificación. Esto se debe en parte a que todo el Walt Disney World Resort tiene un sistema de conexiones internas, desde colectivos, embarcaciones y hasta un monorriel que facilita la circulación entre parques y hospedajes. Conociendo esto, no es necesario alquilar un auto para poder ahorrarse los gastos de estacionamiento, excepto por los dias que quieran visitar otros parques. Más aún, en el plano de los beneficios, si bien algunos de ellos se encuentran actualmente suspendidos por la pandemia (pueden leer más detalles acá), Disney no es ingenuo a la hora de tomar las riendas en tus vacaciones y encargarse de horarios, comida y demás previsiones para que vos y tu grupo puedan dedicarse al disfrute. A saber (y nuevamente, hablamos de beneficios suspendidos o sin claridad de cuándo volverán): quienes se hospedan en Disney puede reservar con 60 días de anticipación sus fastpass (contra 30 para el resto del público), el Disney Dining Plan (la opción de comidas “pre-adquiridas”) muchas veces se ofrece gratuitamente para visitantes en hoteles internos y, por último, las extra magic hours, la posibilidad de ingresar/egresar de los parques antes que el grueso de los asistentes, es otro de las grandes oportunidades. Sobre esto último, volvemos a aclarar que, al momento de escribir la nota, lo único funcionando son las extra magic hours, por lo que revisar el sitio web oficial de Disney a la hora de reservar siempre es una buena idea y están los traslados gratuitos del Aeropuerto de Orlando a los Hoteles Disney Resort.
En última instancia, lo que equilibra la balanza para Disney es el detalle. Un hotel de Disney no es un mero cuarto para caer muerto entre parque y parque, es un espacio pensado a imagen y semejanza del mundo animado del ratón. Todo hotel cuenta con preciosas decoraciones de personajes, oportunidades de fotografía con estatuas de todo los tamaños de los protagonistas de sus películas y, ante todo, la calidad de la atención suele dar que hablar, con empleados que esbozan la misma actitud esperable dentro de los parques: calidez, humor y orientación al servicio. Digamos que la norma es la calidad y la excepción, el destrato. Una vacación para muchos no es un momento de escatimar, y este tipo de lugares suelen recompensar ese esfuerzo. Cerrando la idea, los hoteles más lujosos dentro de Disney directamente apuntan a la experiencia, siendo quizás uno de los ejemplos más paradigmáticos el hotel de Star Wars próximo a terminarse y sin fecha de apertura aún, la simulación de un elegante resort espacial. Con opciones tanto para adultos como niños (de edad y del corazón), Disney siempre contempla todas las opciones.
Orlando más allá de Disney
Como bien dijimos, Florida es mucho más que Walt Disney World Resort, y la competencia de resorts como Universal no tienen nada que envidiarle a Mickey. Así, millones de visitantes anuales van al estado del norte en busca de múltiples atracciones. A la hora de elegir hospedaje, quedarse dentro de Disney inevitablemente conduce a concentrarnos en esta atracción en desmedro de las otras. Sin embargo, esto no quiere decir que sean opciones excluyentes. Aquí es donde el alquiler de un auto juega un rol clave. La autonomía del coche propio reducirá esas distancias nada desestimables entre puntos de interés, puesto que, si bien Disney en sí no pone ningún reparo a quienes lo eligen para pasar sus noches a la hora de cruzar a la aventura de Universal, digamos que tampoco resultará fácil acceder por medios propios de un punto a otro sin gastar unas cuantas monedas en servicios como Uber. A su vez, aun rentando movilidad propia, los gastos en gasolina no deben ser ignorados. Asimismo, muchos piensan en Orlando y también se les viene a la mente las compras, por lo que estar motorizado facilita también el acceso a los shoppings y centros comerciales, así como la posibilidad de un baúl para gastar sin cargo de conciencia.
Recuperando la idea de quedarnos afuera de Disney, tanto con o sin auto, un eje central que nos puede resultar útil a la hora de elegir la estadía es la proximidad a la Orlando International Drive, la autopista que conecta el grueso de las atracciones locales. La cercanía a la misma redunda en menores tiempos de viaje y, en consecuencia, más tiempo de parques. Por último, si estamos en plan de ahorro y comer comida de los parques encarece nuestro viaje, International Drive también cuenta con múltiples restaurantes y supermercados en sus alrededores, posibilitando la compra de comida para ingresar a los parques (viandas sencillas como sándwiches y botellas de agua, permitidas en los parques) o cenas en locales de comida rápida principalmente en la noche, cuyos precios son considerablemente menores que al interior de Disney.
En definitiva, economía, movilidad y planificación son variables sencillas y elementales para hacer nuestra selección. Pensarlas en relación con nuestro grupo de viaje (cantidad de niños y adultos, por ejemplo) y nuestras posibilidades a la hora de volar para el norte aseguran un equilibrio apropiado para cada visita. Y volvemos a insistir con lo mismo: si bien Orlando es un gasto considerable a la hora de pensar nuestras vacaciones, la oportunidad de un viaje mágico no depende solo del dinero, y planificar correctamente en base a nuestro presupuesto nos garantiza una vacación inolvidable.
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